DÉCIMA TERCERA SEMANA: Familia de Camilo de Mézerville y Felicia Quirós. Tercera y Cuarta Generación de los de Mézerville en América

DÉCIMA TERCERA SEMANA: Familia de Camilo de Mézerville y Felicia Quirós. Tercera y Cuarta Generación de los de Mézerville en América

Después de Emilio, el siguiente de los hijos varones de la tercera generación de la familia de Mézerville Ossaye en América fue Camilo, quien llegó a Costa Rica de 18 años. Al contraer nupcias con Felicia Quirós, sus siete hijos de Mézerville Quirós conformaron la rama, establecida en San José, de la cuarta generación de Mézerville.

1881. Nace Felicia Quirós Quirós, hija de un matrimonio entre primos hermanos, quien se uniría años después a la familia de Mézerville.

Don Justo Quirós Montero y doña María Quirós Aguilar eran entre sí primos hermanos. Ellos fueron los padres de ocho hijos, aunque los dos varones murieron jóvenes. La tercera de las seis hijas fue Felicia, bautizada en San Juan de Tibás el 6 de noviembre de 1881 como Felicidad Quirós Quirós. Quizás debido a la estrecha consanguineidad de los padres, don Justo se preocupaba de que ésta pudiera acarrear consecuencias negativas en la familia y promovió, en adelante, que varias de sus hijas se casaran con yernos de procedencia extranjera. Entre ellas, Otilia se casó con don Fernando Goicoechea, de origen vasco, Luz con don Luis Carlos Rodríguez, Colombiano, Felicia con don Camilo de Mézerville, de ascendencia francesa, y Ana María contrajo nupcias con don Porfirio Oduber, de origen francés y proveniente de Curazao. Así, pasados los años, Felicia llegó a ser, al mismo tiempo, tía del presidente de la república, don Daniel Oduber Quirós, y del arzobispo de San José, Monseñor Carlos Humberto Rodríguez Quirós.

1897. Baile de debutantes para la inauguración del Teatro Nacional.

Poco tiempo después de que don Rafael Yglesias conociera a Noemí de Mézerville, se dio la solemne inauguración, el 21 de octubre de 1897, del Teatro Nacional. Entre las actividades que formaron parte de esa celebración, se organizó allí un suntuoso baile al que asistirían también las jovencitas debutantes que, por primera vez, participaban en una recepción de sociedad. Ese era el caso de Felicia, quien apenas iba a cumplir 16 años, y participó en el evento con sus padres, Don Justo y doña María, y con sus dos hermanas mayores. Esa solemne actividad fue presidida por don Rafael Yglesias, junto con los miembros de su gabinete, y sus esposas. Entonces, le sugirieron a don Rafael bailar con alguna de las debutantes y éste optó por invitar a Felicia, quien tuvo el honor de danzar el primer baile de su vida con el presidente de la nación.