Uno de los cursos que más me enriqueció durante mi carrera fue el de Psicología Existencial, que llevamos con el Dr. Rodrigo Sánchez Ruphuy. Él se había doctorado en Leipzig, Alemania, y se identificaba especialmente con el existencialismo y los psicólogos humanistas. Con el Dr. Sánchez Ruphuy guardo una deuda de gratitud, pues no sólo me escogió como asistente, sino que me contrató, junto con Ana Rita Pagura, para laborar como psicometristas en la Sección de Medicina Psicosomática del Hospital México.
Sigue leyendo